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Pejerreyes y tarariras en Pichanas

Gareteando en el Noroeste cordobés
Por: Pablo Luis Pfeiffer
Les presentamos un detrás de escena con fotos inéditas, del informe publicado en la revista "Panorama de Pesca" edición mayo 2013. 

Importante: El presente es un informe "exclusivo" propiedad del autor, cedido únicamente a Magazine Pesca en internet y al multimedio “Panorama de Pesca”, queda estrictamente prohibido su reproducción total o parcial en otro medio informativo (revista, web, blog) como así también en medios interactivos (foros y redes sociales) sin la correspondiente autorización y solo podrá circular vía enlace o link que direccione sin intermediarios y de manera directa a nuestro sitio web (www.magazinecordobapesca.blogspot.com.ar) nunca mediante la utilización del copy/paste (copiar y pegar) respetando lo establecido por ley de propiedad intelectual 11723 (y sus sanciones correspondientes art.71 y 72)
Dos especies, una sola pasión…
Nuestra provincia de Córdoba atesora una serie de diques en donde podemos disfrutar nuestra disciplina, en un entorno natural diferente, y con ese plus que nos otorga estar en un ámbito cuya belleza paisajística es reconocida a nivel nacional e internacional como un gran pilar de nuestra estructura para constituirnos como una provincia netamente turística. 
Gracias a la cordial invitación de nuestro amigo Martín Occhetti, es que decidimos organizar una serie de relevamientos conjuntamente con la Agencia CórdobaTurismo.
Este organismo ha decidido darle a nuestra disciplina el valor turístico que corresponde, y tal consideración ha traído aparejado este impulso por acompañar a quienes hacemos periodismo especializado en pesca en la provincia.
El destino a relevar en esta ocasión, fue nuestro Dique Pichanas, el mítico pesquero de tarariras, de agua transparente y árboles sumergidos.
Es por ello que nos pusimos en contacto con Martin Rodriguez, titular del complejo Cabañas “Barrancas de Río” en Villa de Soto, quien cordialmente nos brindó alojamiento y nos llevó al pesquero a oficiarnos de guía en esta difícil cancha de pesca. En esta ocasión la idea era buscar no solo la tararira en una época donde ya no hay tantas respuestas de pique, sino que apuntar a la captura del pejerrey.
Con ese programa, partimos desde la localidad de Villa de Soto con destino al dique, 21 kilómetros deberíamos recorrer solamente para arribar al sector del paredón en donde se encuentra el complejo del SEP.
Una vez en el lugar, bajamos el bote, y nos ubicamos en nuestro primer sector de pesca, dentro del primer espejo. Antes de comenzar el garete, probamos pescar anclados, utilizamos líneas de vuelo y balancines, y en aquella ocasión fue Martin Occhetti quien tuvo la primer respuesta de pique, hermoso ejemplar de pejerrey, luego se sucedieron varias capturas, en algunos casos llamó poderosamente la atención como estaban seccionadas parte de la aleta caudal, fruto de frustrados intentos de captura de las tarariras residentes en el pesquero.
Comenzamos a notar que había movimiento de cardumen en superficie, y es así que sacamos nuestros elementos de flote, aquí denominados chirimbolos (aparejo compuesto por dos boyas tipo aceituna o yo-yo) pescamos anclados y comenzamos a tener respuestas de pique.
Todos estábamos pescando, pero de a poco nos dimos cuenta que el pique se cortaba, volvía con fuerza y al instante se cortaba de nuevo. Sin dudas era la hora de garetar, así que comenzamos la deriva. Pero algo estaba mal, el garete no era óptimo por no contar con un ancla de capa, utilizamos el ancla común apenas sumergida en el agua al medio del bote sobre estribor, pero era muy pesado, no lográbamos buena performance de pesca. Y allí afloró el “ingenio cordobés” de repente observamos como Martin nuestro guía ataba a una soga su asiento, una silla de plástico y de inmediato la arrojó al agua, y fue increíble observar el resultado de esta “ancla de capa casero” no podíamos creerlo, y menos cuando comenzamos a tener excelentes respuestas en el pique fruto de la correcta velocidad en la deriva.
Una vez satisfechos todos los integrantes de la excursión por haber tenido buena pesca de pejerrey decidimos ir a probar con las taruchas, en el corto lapso de tiempo y luz de día que nos quedaba; para ello probamos en una bahía cercana, Martín Rodriguez y quien relata lo hicimos con señuelos, mientras que Martin Ochetti hacía lo propio pero con carnada, utilizando un pejerrey, pero con la misma modalidad de tirar y recoger que hacemos con los artificiales, dándole vida al engaño. 
Lamentablemente los señuelos no fueron efectivos, pero al menos nuestro compañero logro con carnada un par de ejemplares antes del cierre de la jornada. Como siempre, nuestra hoplias vendió cara su derrota, obligando a Martín a esforzarse al máximo para obtener su captura, ya que la tararira no solo pelea, sino que en este dique busca los palos sumergidos para ganar la batalla. Ambos peces fueron fotografiados, debidamente oxigenados, y devueltos a su habitad como corresponde. 
Es notable ver lo saludable que estan los ejemplares de tarariras, ver sus aletas, en particular la caudal, un “perfecto abanico”  como le gusta decir a los lugareños, en clara referencia a la  inexistencia de depredador alguno que deje rastros de ataque en su cuerpo… salvo claro esta, el hombre, pescadores inescrupulosos que matan decenas de éstos peces, sin pensar que es una especie autóctona que merece nuestro respeto. Lamentablemente, y como pasa en muchos sitios, la especie es muy depredada en este espejo.
Algun día los pescadores vamos a entender de una vez por todas que la pesca se desarrolla en espacios públicos, y que lo público no se puede utilizar como uno quiere, sino que tenemos que ser responsables, entender que cuando extraemos un pez de un espacio “de todos” no estamos sacando “mi pescado” (como se suele escuchar) sino el que eventualmente podría disfrutar otro pescador, y que como reproductor seguramente van a poder disfrutar nuevas generaciones de pescadores.
Y aclaro que no me refiero solamente al respeto por la legislación vigente, sino que debe mediar por sobre todo un “compromiso ético” de valorar esta especie, cuidarla y llevar adelante todo lo disponible a nuestro alcance para su protección… y porque no valorarnos un poco mas como “pescadores”, definición que debería estar alejada del mero y simple concepto de extracción irracional de peces (depredación)
Desde el punto de vista reglamentario, cada pescador debe portar el correspondiente permiso o licencia de pesca, y debe respetar el cupo máximo de extracción de pejerreyes en este espejo que es de 50 ejemplares. La pesca debe realizarse en horario de 07.30 hs hasta las 19.00 hs, en esta época (otoño e invierno) y de 07.00 hs a 21.00 hs en primavera y verano, ya que rige actualmente una disposición de veda de pesca nocturna (resolucion nro. 748) de la autoridad de aplicación, la Secretaría de Ambiente Córdoba
Sin mas solo resta invitarlos a visitar nuestra provincia, a darse una vuelta por el noroeste cordobés y hacer turismo de la mejor manera posible… es decir, pescando.
Así lo registró la tv nacional: Panorama de Pesca tv (Jueves 22 hs. por Argentinísima Satelital) 
Servicios:
Cabañas "Barrancas del Río". Ubicadas a 150 metros de Ruta Nacional 38
Agradecimiento:
-Agencia Córdoba Turismo
En especial al sr Martin Occhetti quién estuvo a cargo de todos los aspectos organizativos, traslados y alojamiento.
-Municipalidad de Villa de Soto
Tel./ FAX: (54-3549) 480507
Av. 25 de Mayo 220. (X5284AAP) Villa de Soto, Córdoba.
villadesoto@villadesoto.com
Un agradecimiento especial a funcionarios de turismo quienes cordialmente nos invitaron a cenar en las instalaciones del hotel municipal
Hotel Municipal: 
Balcarce Nº 778
Villa de Soto
Córdoba
Argentina
Tel. 03549- 480955 / 15455385
reservas@villadesoto.com

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